Racores de lubricación de norelem

Los racores de lubricación son componentes que tienen una rosca para enroscar o un diámetro para encajar a presión, así como la boquilla de engrase en sí misma. Se usan sobre todo en la construcción de máquinas y vehículos, así como en las máquinas agrícolas y de construcción. Allí se encargan de la lubricación periódica de los árboles de accionamiento, los ejes, los cojinetes, rodamientos y roscas.

Funcionamiento

Los racores de lubricación permiten aplicar en unión positiva una pistola engrasadora. El punto de lubricación se rellena a través del racor de lubricación, lo que también se denomina lubricar y constituye una operación sencilla. Para ello, el racor de lubricación se conecta con la boquilla de una pistola de engrase, una pistola inyectora u otro dispositivo dosificador adecuado. La boquilla se coloca en unión positiva con el racor de lubricación. Al accionar la pistola engrasadora, el lubricante se aplica a presión a través del racor de lubricación en el punto de lubricación. En un principio, la cavidad en el racor de lubricación está cerrada mediante una bola de resorte. Pero cuando la presión aportada por la pistola engrasadora colocada es suficientemente alta, la válvula de retención de tipo bola se abre y el lubricante fluye pasando la bola hacia el interior del punto de lubricación. Cuando la pistola engrasadora se retira de nuevo del racor de lubricación, la presión cae también. La bola puede volver a su posición inicial, cerrando de nuevo el racor de lubricación. Con ello, el punto de lubricación está protegido de la suciedad y las influencias climatológicas. Al mismo tiempo se evita que el lubricante aportado se salga de nuevo.

Versiones de norelem

La gama de norelem incluye entre otros, racores de lubricación de forma cónica según DIN 71412, planos según DIN 3404 y en forma de embudo según DIN 3405. Además tiene disponibles diversos accesorios.

Racores de lubricación con forma cónica según DIN 71412

Racores de lubricación con forma cónica según DIN 71412 también se denominan racores cónicos de lubricación. Están provistos de una rosca cónica (en forma de cono) y son adecuados para puntos de lubricación que se deben lubricar de manera frecuente y confiable. Gracias a sus diversas aplicaciones, pertenecen al tipo de racor de lubricación más extendido. Las versiones se clasifican como se indica a continuación:

• Racores cónicos de lubricación de forma A con hexágono exterior y cabeza recta
• Racores cónicos de lubricación de forma B con hexágono exterior y cabeza acodada 45°
• Racores cónicos de lubricación de forma C con hexágono exterior y cabeza acodada 90°
• Racores cónicos de lubricación de forma D con cuadrado exterior y cabeza acodada 45°
• Racores cónicos de lubricación de forma D con cuadrado exterior y cabeza acodada 90°